Asi se titula mi messenger. Llora lechuza, llora. Que satisfacción mas grande, que ganarles a las lechuzas.(antiguos chunchos). Yo sé que muchos me entienden, pero hay personas que no deben de captar, lo que significa derrotar a las lechuzas, hacerles perder el campeonato, dejarlos fuera de la copa Libertadores, hacerlos llorar y todo eso mediante penales y a estadio lleno.¿Que mas podía pedirle a mi buen Dios que eso? Termina el 2005. Año memorable. Verlos caminar, con la cabeza gacha, rumiando la derrota, reconociendo que la UC es lejos, pero lejos, el mejor equipo chileno y uno de los mejores de Sud América. Tri campeones chilenos, si, tri campeones, ya que los dos campeonatos que perdimos con la Unión Española en semifinales, solo demuestran lo injusto, que es este campeonato chileno, ya que pocas veces como fue ahora, sale campeón el que mas se lo merece. Por lo tanto somos tri campeones.
Ganar siempre es positivo, pero ganarles a las lechuzas, supera cualquier tipo de placer, incluso ese que están pensando.
No ví los penales. No me sentía bien durante el partido. Estaba un poco hipertenso. Estaba mareado. Solo salté cuando mi hijo, mi querido hijo, gritó CAMPEONES. Ahí se me aclaró la vida. Había agonizado por hora y media. Y vino la explosión, los abrazos, las lágrimas. Si, las lágrimas. Porque por la UC lloro y lloro con orgullo, lloro de felicidad. Son diferentes a las lágrimas que salían y brotaban del codo sur de estadio. Las mías eran lágrimas de hombre feliz, no de lechuza amargada, perdida, extraviada, podrida, sin rumbo, sin nada, sin existencia, sin donde apoyarse. Porque sencillamente no son nada. Caminé tambaleante a la cancha. Los abracé uno a uno. Con mucho cariño, a los chicos nacidos en el club y que conozco desde que llegan a los once o doce años. El Chapita Fuenzalida, el Nico Nuñez, Eduardo Rubio, Paulo Garcés (ojo, que este va a ser el mejor arquero chileno de toda la historia. Se los digo ahora para que lo recuerden en un par de años), César Cortés, Muñoz, etc. Entre medio de abrazos y fuegos artificiales, miro a la barra, a ese grupo de muchachos de diferentes niveles sociales y que los une su amor por la UC. Los conozco, son buenos, pienso en ellos y lo felices que deben de estar. He viajado mucho con el plantel y donde hemos ido, alli están ellos. Hay que respetarlos, conocerlos y quererlos. Son buenos, se los digo yo. También abrazo al Tati, al Polo Quinteros y sobre todo a Jorge Pellicer. El sabe como me la jugué por él, como lo apoyé, incluso cuando nacieron esas injustas dudas por uno o dos penales mal pateados. Jorge es una gran persona. Hay que conocerlo. Es imposible no caer en comparaciones con Manuel Pellegrini. Otro que defendí a muerte. Ambos son muy parecidos, caballeros, personas decentes, claritos de película, convencidos de lo que hablan y predican. Sus jugadores los quieren,se sienten respaldados por ellos. Y por Dios, que es importante eso.
Hoy es el primer día del 2006.Terminé el año contento. No fue un año redondo, he tenido problemas personales y de familia fuertes, pero todo tiene solución. Terminé contento porque las lechuzas están en el suelo, humilladas, desplumadas, muertas. Terminé contento porque quiero a la vida y ella también, parece que me quiere. Y ahora ¿saben que voy a hacer? Empezar el año contento y eso me va a traer un buen año.
Un abrazo, para los que tienen la paciencia de seguirme y leerme. Gracias por los emails que me envían. Gracias por todo Y como decía la zurda poeta "Gracias a la vida, porque me has dado tanto..." Llora lechuza, llora.